¿Tiene dolores de cabeza y mareos? Mírese la boca

¿Tiene dolores de cabeza y mareos? Mírese la boca

Susana Siemens Barreto – Odontóloga especialista en cat y smt

«La buena noticia es que este problema se puede solucionar con unos tratamientos relativamente sencillos para el paciente, acabando así con años de sufrimiento»

El dolor de cabeza crónico (migrañas, cefaleas tensionales, jaquecas, etc.) puede llegar a ser muy incapacitante. Afecta a un número importante de la población que, muy frecuentemente, se ve avocada a largos tratamientos farmacológicos y, en ocasiones, también mediante férulas, que fracasan o son insuficientes. Lo mismo ocurre con los mareos y vértigos, el síndrome de Meniere y las neuralgias del trigémino.

Estos casos ocurren porque tanto las migrañas como los mareos y vértigos se clasificaban hasta hace poco como dolencias de origen desconocido. Pero ya no es así.Al desconocer la causa del dolor, éste ha sido tratado, no ya como un síntoma o conjunto de síntomas, (producidos por una enfermedad),sinocomounaenfermedad en sí misma. A los pacientes se les suele transmitir que su dolencia, o bien es de origen genético y deben aceptarla y convivir con ella o, incluso, que el dolor no es real, sino una somatización de sus ‘tensiones emocionales’. Hoy sabemos que existen dos patologías que explican estos síntomas: CAT (CompromisoArticularTemporomandibular) y SMT (Síndrome del Músculo Temporal), y ambas se localizan en la boca.

Estas dos patologías se originan por faltar espacio suficiente para que el músculo temporal y la mandíbula puedan llevar a cabo sus movimientos normales durante la masticación o el habla. Si hay SMT, ocurre un atrapamiento del músculo temporal durante estos movimientos, mientras que en el caso del CAT se produce un choque repetido en el tiempo de la mandíbula contra determinadas zonas del maxilar superior. Este pequeño impacto, que el paciente no percibe como doloroso y del que ni siquiera es consciente, deriva al cabo de los años en el conjunto de los síntomas antes descritos, entre otros. ¿Y porqué estos pacientes no sienten dolor en la zona del impacto, dentro de la boca, sino en lugares tan dispares como la nuca, la sien o dentro del oído, etc?

Es fácil de entender si pensamos en las ramificaciones de nervios como si fueran un entramado de cables eléctricos intercomunicados en determinados puntos. El impulso nervioso se transmite de forma similar a como lo hace la corriente eléctrica, siendo por tanto muy común que dé «señales y síntomas a distancia».

La buena noticia radica en que este problema se puede solucionar con unos tratamientos relativamente sencillos para el paciente, acabando así con años de sufrimiento. Si usted ya ha visitado al neurólogo y al otorrino sin que estos hayan encontrado una causa que explique su dolor, sus mareos y/o sus vértigos, hará bien en revisar su boca con un dentista especializado en CAT y SMT.

Para llegar al diagnóstico de CAT y/o SMT es necesaria le confección de una historia clínicacompleta,enlaquerecabaremos todos los signos y síntomas que ocurren «del cuello hacia arriba». Continuaremosconunainspección minuciosa, tanto intra como extraoral, un test de Romberg, y una palpación de las zonas o puntos desencadenantes del dolor. No es necesaria una analítica complementaria compleja, nos apoyaremos de un estudio radiológico sencillo y en un estudio funcional (es fundamental conocer, por ejemplo, cómomasticaelpacientepara :: FOTOLIA entendercómosehacedaño). El tratamiento que se instaure dependerá de dónde y de qué manera se hace daño el paciente.

El CAT afecta al 20% de la población y sus efectos pueden aflorar ya en la niñez. De ahí la importancia de un diagnóstico temprano, lo más precoz posible, para evitar la cronificación de los dolores. Preguntas que, en caso de respuesta afirmativa, nosllevanapensarenunapatologíafuncionaltemporomandibular:
–¿Nota cansancio o dolor en la zona mandibular al masticar o hablar mucho?
–¿Tiene neuralgias del trigémino de repetición? –¿Nota que le ‘cruje’ la mandíbula?
–¿Se le ‘desencaja’ o se le ha ‘desencajado’ alguna vez la mandíbula al abrir o cerrar?
–¿Tiene dolor frecuente de cabeza o cuello?
–¿Tiene sensación de ‘boca ardiente’?
–¿Tiene la sensación de que ‘no cierra la boca como debería’?

 

 

Origen: Diario LA RIOJA. 18.07.14